Motivos para viajar sola

Hay algunos viajes que tienen una especie de energía que nos impregna para siempre.

No tienen nada que ver con tiempos ni objetivos y sí mucho que ver con el descubrimiento de lo desconocido, con rendirse a nuevos horizontes: geográficos, físicos, mentales y espirituales.

Y sin embargo, aun habiendo muchas opciones para viajar sola, solemos tener ciertas reticencias y miedos que no nos permiten dar el paso.

motivos-viajar-sola

Así que tratamos de buscar compañeros de viaje que coincidan exactamente con nuestras vacaciones de verano, de navidad… con nuestros gustos viajeros, nuestra manera de vivir los viajes…

Es curioso cómo viviendo en una sociedad cada vez más individualista, donde nuestro Smartphone parece ser todo lo que necesitamos para sobrevivir al día y los ritmos que llevamos, parece que para viajar necesitamos estar arropados por algún amigo o conocido.

Sin embargo, te vamos a dar algunas razones que, sin duda, te harán replantearte la idea:

  • No existe el compañero perfecto de viajes

Simplemente no existe. Sí como no existe el hombre perfecto, ni la amiga perfecta, ni nosotras somos perfectas.

Cada persona somos perfecta para unas cosas concretas… y para otras, encontraremos otras que cumplan su función como tal.

La amiga que no perderá la sonrisa ni el ánimo mientras camináis por el desierto del Sáhara a 50 grados, no será la misma que disfrutará yendo de shopping por el SoHo de NY.

Es como compartir piso… al principio suena muy divertido pero, poco a poco, iremos descubriendo pequeños detalles que nos molestan (o nos llegan a sacar de quicio). En nosotras está el cómo gestionar este tipo de situaciones, que no siempre es fácil.

 

  • Verás mucho más allá

La cuestión es que no necesitas a nadie para viajar. Porque cuando viajas sin alguien que te dé la mano (en sentido real o figurado), es mucho más probable que, simplemente, abras los ojos y te pares a mirar lo que tienes delante.

Un atardecer en la playa, la terraza del Empire State o la grandeza del Taj Mahal. Cuando viajas sola, tus sentidos están mucho más despiertos. Y esto está demostrado, hay ciertos olores, sabores y sensaciones que aumentan los niveles de felicidad.

El escritor Eric Barker nos dice: “la próxima vez que te pase algo bonito, para y deja lo que estés haciendo. Dedícate un minuto a disfrutar de ese momento. Centrarnos en lo positivo y apreciarlo, puede aumentar nuestros niveles de felicidad en menos de una semana”.

maleta-viajar-sola

“la próxima vez que te pase algo bonito, para y deja lo que estés haciendo. Dedícate un minuto a disfrutar de ese momento. Centrarnos en lo positivo y apreciarlo, puede aumentar nuestros niveles de felicidad en menos de una semana”.

Cuando sales al mundo, te das la oportunidad de respirar, de vivir el momento.

  • Diriges tu propia aventura

Viajar con otra persona, a veces, puede ser como una pequeña carga: diferentes apetencias a la hora de comer, de dormir, de descansar…

Ojo, que también aporta momentos geniales, seguridad y confianza. Pero no sólo nos puede limitar en temas como los ya comentados, sino que estaremos menos receptiva a la hora de conocer nuevas personas, lo más enriquecedor de viajar.

 

Si aun así, viajar sola no termina de convencerte siempre puedes unirte a un grupo de viajeras.

 

Entrarás en un grupo de gente nueva que tampoco se conocen entre sí, por lo que estarán mucho más receptivas a la hora de entablar nuevas conversaciones, compartir opiniones… Saldrás de la zona de confort y podrás vivir nuevas experiencias. Te lanzas a viajar como si lo hicieras sola, pero con la seguridad de tener a quién recurrir si lo necesitas.

Para viajar sólo te necesitas a ti misma. Dale al mundo la oportunidad de conocerte.

viajes-grupo-chicas

¿Viajas sola? Únete a nosotras. Consulta nuestro calendario de viajes haciendo click aquí